Las viviendas de obra nueva son como un lienzo en blanco. Al principio carecen de personalidad, pero basta con la llegada de sus inquilinos para que esta se transforme. Sin embargo, muchas personas no saben cómo convertir una vivienda en un hogar. En esta entrada descubrirá cómo conseguirlo.

1. Defina su camino

Al entrar a vivir en una casa nueva lo normal es no saber por dónde empezar. Sin embargo, un buen comienzo es recapacitar sobre su propia personalidad y gustos, los cuales deben aparecer plasmados en lo que será su futuro hogar. Tómese su tiempo y dedique un poco de esfuerzo a cada habitación. Si es una persona energética, déjelo ver en una decoración donde prime el rojo; pero si es tranquila y hogareña, los colores cálidos y acogedores son la mejor elección.

2. No esconda sus aficiones

Su pasatiempo favorito debe dejarse ver sin tapujos. Este es su hogar, su espacio personal donde relajarse, dedicarse al ocio o aprender nuevas habilidades. Así, exponga sus aficiones dejando un hueco para ellas. Por ejemplo, un amante de la panadería debe reflejar esta pasión en su cocina, la cual contará con todo lo necesario para elaborar todo tipo de panes y repostería. Además, algunos utensilios, como las cestas y boles, son una decoración muy original y que dejará claro qué es lo que más le gusta hacer.

3. Coloque plantas

Las plantas otorgan una gran vitalidad y frescor, además de un vibrante colorido durante el verano. Sin duda, debe contar con ellas para personalizar su nueva casa. Por suerte, podrá elegir entre diferentes tamaños y formas que se adecuen sin problemas a cada estancia. Quizás una enredadera en la terraza sea lo que busca o unas pequeñas macetas en el salón cerca de la ventana. Así, irá construyendo poco a poco la personalidad de su nueva vivienda.

4. Cuadros y fotografías

Estos elementos son básicos para constituir un hogar, en especial las fotografías. Nada habla mejor de usted y sus vivencias que las fotografías de toda una vida. Su habitación y el salón son los lugares ideales para colocarlas. Además, los cuadros también hablan de la forma de ser de una persona, por lo que colocar algunos en las zonas de paso contribuirá a la decoración y a hacer suya la casa.

En definitiva, hacer suyas las viviendas de obra nueva en Málaga le costará tiempo y un poco de esfuerzo, pero al final tendrá un lugar al que llamar hogar. No olvide dejar patente su personalidad y sus pasatiempos. Así, logrará que ese lienzo en blanco se llene de buenos momentos que irán, poco a poco, transformándolo en algo diferente.